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lunes, 23 de septiembre de 2019

#0045. Reflexiones sobre la justicia: Lo que me deja la película The Green Mile (1999)

¿Qué me deja?

Reflexiones sobre la justicia: Lo que me deja la película The Green Mile (1999)

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Contexto: The green mile es una película basada en un libro homónimo escrito por Stephen King, quien ya ha dado mucho material para hacer películas basadas en sus libros. En esta ocasión la historia se desarrolla en la época actual, mientras un señor, ya en una edad avanzada, platica la historia que vivió cuando era el encargado de un complejo dentro de una cárcel que alberga a las personas que están esperando se cumpla su sentencia: la pena de muerte en la silla eléctrica. Muchas cosas nos deja esta película, además del tema escabroso de la muerte suceden otros sucesos alrededor de la llegada de un nuevo preso y el efecto que produce en todos.

Aunque tengo cuidado, a veces no puedo evitar hablar de cosas muy particulares de la historia. Preferible no continuar si no se ha visto la película.

Esta es la tercera cosa que me dejó.

3. Tienes derecho a un abogado

Hay muchas cosas que me parecen absurdas, las dos que se llevan las palmas son 1) que alguien pueda ser un mejor abogado que otro, y 2) que se permita donar a una campaña política. Del segundo punto hay mucho, mucho que decir, y es sorprendente que muchos no entiendan a qué me refiero, o en dónde está lo absurdo, eso es más absurdo aún, pero lo dejamos para otro día.

Por cierto, me refiero a abogados expertos en derecho penal.

¿Qué tiene de absurdo que un abogado pueda ser mejor que otro?, es absurdo por la sencilla razón de que al aceptar esto, estamos aceptando también que la justicia no es igual para todos, que con un abogado la ley aplica diferente a las personas. ¿Qué no la ley es una y no se debe prestar a interpretaciones?, ¿Por qué habilidades de escritura y, ahora en México, de oratoria, pueden hacer que una ley se perciba de forma diferente?

Amigos abogados me comentan que un abogado puede ser mejor a otro ya que presenta la evidencia de forma diferente… yo me pregunto ¿No es esa la labor de los policías, investigadores… o forenses, según el caso?

También se dice que la ley no es fija e infalible, que cada caso es diferente y podría prestarse a diferentes interpretaciones. Lo curioso es que, si un abogado logra persuadir a un juez o a un jurado a que declare inocente a una persona doblando la ley o cambiando la forma de ver las cosas, no provoca que los casos similares a éste en el pasado se “actualicen” y todas las personas que fueron juzgadas culpables dejen de serlo, esto sí le quitaría lo absurdo.

En nuestra película tenemos el caso de una persona indefendible, y no por los actos que presuntamente cometió, sino por los prejuicios de la época, cultura y geografía. El estado le consigue el peor abogado que pudo encontrar, uno con un pasado familiar triste y fácilmente comparable con el caso de las víctimas de nuestro protagonista. Además de esto, dicho abogado tiene una habilidad con la que hay que tener mucho cuidado: no le importa perder en su trabajo siempre y cuando siga sus reglas morales... y no legales, en otras palabras, siendo injusto.

Al final nuestro protagonista se despide diciendo, “Lo siento, por lo que soy”, pero no se refiere al gran poder que tiene, sino al cascarón, a eso que provocó tanto odio e incomodidad en la gente, a eso que no podemos entender y que por culpa de un abogado las mismas leyes no pudieron defender. Si uno es culpable sin importar si conoce o no la ley, ¿Por qué en los juicios permitimos precisamente eso, que quien conozca mejor la ley pueda cambiar un veredicto y salvar o condenar una vida?

Y bien, esto fue lo tercero que me dejó...

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