¿Qué me deja?
Falling away with you (2003): La canción de los recuerdos y promesas olvidadas
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Un poco de contexto
Falling away with you es una canción del grupo metal progresivo Muse, que forma parte del álbum Absolution; el que en la portada tiene a un muchachón parado, con una máscara anti-gas en la mano, viendo volar personas, las cuales se ven como sombras en el suelo. La popularidad de la canción tuvo un comportamiento similar al de una película de culto, en su momento pasó desapercibida y ahora es más famosa, ya que los fanáticos recién le encontraron el sabor.
Personalmente tengo una historia con la canción; la escuché por primera vez en 2008 - 2009, junto con mi descubrimiento del grupo en general, y después de dos o tres veces me encontré extrañando la canción y queriendo volver a escucharla. En diversas ocasiones mi niña, de entonces dos años, estaba presente mientras la escuchaba, lo que provocó que a ella también le gustara y me la pidiera constantemente. Ante su incapacidad de hablar inglés me la solicitaba como “La canción de los pajaritos”, y es así como pasó y seguirá siendo parte de mi vida.
Todo esto lo recordé ayer, mientras la escuchaba de nuevo, después de ocho años de haberla excluido de mis listas, la misma niña, ahora más grande, me preguntó por mi canción preferida. Esto fue lo que me dejó esta experiencia.
1. Las desgracias en la memoria selectiva
A medida que vivimos, sin querer escondemos algunos recuerdos en lo más profundo. Nos damos cuenta de esto cuando traemos al recuerdo de vuelta, algo nos lo detona, hace que regrese, y con él, otros muchos recuerdos ligados, como algunos olores, personas o lugares que tuvimos que sacrificar en el olvido para darle paso a nuevas vivencias.
Al poner especial atención... ¿Por qué olvidamos esto?, encontramos que son recuerdos tal vez incómodos o que terminaron mal. Lo que alcanzamos a recordar es solamente la parte buena, la parte mala solo está en concepto.
En un capítulo de How I met your mother (S1E4) el regreso de la camisa, el protagonista se da cuenta de que una camisa que no le gustaba desde hace tiempo, le comenzó a gustar de nuevo, con esto concluyó que el amor de su vida pudiera estar en su pasado, por lo que decidió contactar a las personas con las que ya había salido antes. Mientras se desarrolla el capítulo se da cuenta de su error y, eventualmente, para evitar volver a caer en estos errores, comienza a escribir cartas dirigidas a sí mismo (Querido Ted del futuro) donde se explica con detalle por qué dejó a alguien o a algo. Creo que todos deberíamos de hacer esto.
Estos problemas son los que trata directamente nuestra canción, el autor no puede recordar nada malo de sus relaciones, solo recuerda el amor que se tenían y no entiende por qué terminaron, “tal vez no entendí bien las cosas” dice al principio de la canción. En unos los versos dice “Forget that reckless thing turned on”, lo que yo interpreto como una queja ante la habilidad que tenemos de olvidar las cosas malas, habilidad que se prende a discreción e inconscientemente. Esto debe de ser especialmente horrible en un momento de debilidad o soledad: la dejaste ir.
Seguramente podemos encontrar una ventaja competitiva en la humanidad al tener esto “turned on”, como dice la canción, seguramente ayudó mucho a la colaboración entre personas, también se puede ver que los bebés tienen esta habilidad mucho más presente al no demostrar rencor sino solo amor y perdón, seguramente ayudó a que aguantemos a esos pequeños dictadores.
La desventaja más importante es que nos lleva a cometer los mismos errores, y ver esperanza en lugares donde ya buscamos y no encontramos.
2. Lo relajado en hacer algo voluntariamente un poco mal
En diversas ocasiones experimento que el hacer algo un poco mal, siempre y cuando sea voluntariamente, trae mucha paz y hace que entre en un estado de relajación; probablemente por eso sea tan popular el yoga.
En uno de sus chistes, el comediante Louise C. K. habla sobre esto, lo que a él le funciona es poner las manos en la cintura, pero mucho más arriba de lo normal.
Al escuchar el coro de nuestra canción sabes que algo está mal, aunque no seas un experto en música. Hay algo que te hace poner especial atención, a vivir y revivir eso que está mal, como si no pudieras creer que esté ahí. Al mismo tiempo te invita a la relajación, a disfrutar, a separar los sonidos que hacen cada uno de los instrumentos que intervienen.
Aparentemente el coro está movido un “beat” contra el resto de la canción; tal vez sea esto.
3. Pequeñas grandes cosas
A continuación, una parte de la letra del segundo acto de la canción:
Staying awake to chase a dream
Tasting the air you're breathing in
I hope I won't forgot a thing
I wish to hold you close and pray
Watching our fantasies decay
Nothing will ever stay the same
Hay algo mal en esta letra, y la equivocación es tan grande que cambia todo el sentido de la canción.
Si bien en el primer acto el autor se queja de su incapacidad de recordar las cosas malas, en el segundo acto, según la letra descrita arriba, da continuidad a estos pensamientos pero acompañados con noches de insomnio donde no puede dormir por el deseo de volver a verla y a olerla, algo trilladamente romántico.
Si uno escucha la canción, en verdad la escucha, el cuarto renglón del párrafo de arriba realmente dice “Promise to hold you close and pray”; con este pequeño cambio la canción cambia radicalmente, ya no estamos en presencia de un solitón llorando por lo que perdió y quiere recuperar, sino con una persona decidida a hacer algo al respecto, algo que raya en lo metafísico, en lo cíclico.
No sé, esta palabra es lo que hace a la canción sea lo que es, una serie de eventos que dan esperanza, que dan ganas de hacer lo imposible, de revivir vivencias, aun sin el consentimiento de los demás involucrados. Una pequeña palabra bastante complicada de explicar, lo prometo.
Y bien, esto fue lo que me dejó...
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